اميدوارم سفر خوبي داشته باشم زيرا إز صميمم قلبم و با احترام به ديگران سفر خواهم كرد و اين باعث خواهد شد كه تمامي درها به روي من باز شوند

miércoles, 19 de agosto de 2015

Estancia en Isfahán (2)


Kaixo amigos,

Sin prisa alguna, tras el desayuno, sobre las 11,30h me acerco a la tienda "Joseph Carpet" para recoger el equipaje que deje aquí el pasado 9 de Agosto. Me recibe su dueño: Joseph. Hablamos un rato y recojo el equipaje para llevármelo al hotel. Además, quedo con Joshein en vernos a las 9,30 de la noche, hora en la que cierra la tienda. ¡Mamnoon!

Interior mezquita Masjed-e Jame
A continuación, tras recorrer los kilométricos bazares de Isfahán, preguntando a uno y otro, he conseguido dar con la oculta Mezquita del Viernes, Masjed-e Jame, sobre la una y media de la tarde. Os puedo asegurar que no ha sido una tarea fácil. Tiene una antigüedad de 10 siglos y ocupa una superficie de 2 hectáreas, siendo la mezquita del Viernes más antigua de Irán. Sus techos son de ladrillo caravista, en color marrón claro, sin rastro de llamativas lámparas colgando de sus cúpulas. La sensación que transmite es de sobriedad y recogimiento. Desde hace escasos años, incluida en el catálogo de bienes Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco. Aprieta el calor y éste es un buen lugar para evitarlo. En su interior se está francamente bien, recostado sobre sus alfombras.

Después de comer algo ligero en un "fast food" de los alrededores de la plaza Meydan-e Naghsh-e-Jahan me dirijo al palacio Ali Qapu, uno de los puntos emblemáticos de Isfahán, ubicado en uno de laterales de esta plaza, frente a la mezquita Lotfollah. Este edificio se construyó por mandato del Shah Abbas I, para acoger visitas y personalidades extranjeras. Tiene 6 plantas, con un tipo de decoración distinto en cada una de ellas. La planta noble estaba en el tercer piso, abierto y con vistas a la plaza. El sexto piso estaba reservado a las recepciones oficiales. La entrada más la audio guía cuestan 300000 riales, precio muy elevado a mi entender, por dos razones. Una, porque el edificio está en obras en este momento; y dos, porque solo enseñan una mínima parte de lo que fue el palacio, que en su día seguro que fue esplendido.

Una buena forma de terminar el día en Isfahán es hacerlo paseando por ambas riberas del río Zayandeh, muy bien urbanizadas y ajardinadas, entre los puentes Sio She y Khaju. Ayer visite el primero, hoy le toca a éste último...


Puente Khaju
El puente Khaju, llamado también Baba Roknoddin, fue construido en el siglo XVII por orden del rey persa Shah Abbas II y está considerado uno de lo puentes más bellos del mundo. Une el barrio de Khaju, del que toma el nombre, en la orilla norte, con el barrio Zoroástrico, en su orilla sur. Hecho de ladrillo y piedra. Sus dos plantas, 24 arcos, 132 m de longitud y 12 m de ancho hacen de él algo majestuoso. Su parte inferior tiene como finalidad actuar de represa, canalizando el agua sobrante para regadío. A este puente acuden multitud de iranís, al atardecer, para ver la puesta de sol. El cauce seco del río es lo único que desmerece en este esplendido lugar. Una vez al año, hacía el mes de Abril, vuelven las aguas al río. Esto se ha convertido en algo muy señalado, especial..., que los isfahaníes lo han asumido como si de un día de fiesta se tratara, acudiendo en masa para disfrutar del acontecimiento, apostados en sus riberas y puentes.

Alfombra tejida por las dos hermanas
Tal y como habíamos acordado, a las 21:30h en punto, acudo a la tienda Joseph Carpet donde permanezco un buen rato admirando las alfombras que Joshein y Joseph van desplegando delante de mí, a la vez que me van explicando la personalidad y el alma de cada una de estas alfombras, porque amigos, cada una de ellas tiene su historia, la mayoría de veces muy interesante. Las hay de lana de cordero, de camello, de seda..., de todos los tamaños, formas, colores y calidades. Os aseguro que todas son magníficas, pero de entre ellas, algunas alcanzan un nivel extraordinario. Pongo como ejemplo una alfombra de seda, de aproximadamente 1,40 x 0,70 m, tejida a dos caras, hecha a mano por dos hermanas de 13 y 14 años, una por cada lado de la alfombra, durante 6 meses de duro trabajo, en una aldea del sureste de Irán. Y todo ello de cabeza, sin ningún tipo de plano o diseño previos. Es sorprendente que haya personas que sean capaces de hacer algo tan hermoso y de tanta calidad. ¡Puro arte!... y detrás de ese arte, una gran inteligencia.

Joshein, Arezoo, Jon
Después de cerrar la tienda me han invitado a cenar en su casa. Allí nos estaba esperando Arezoo, esposa de Joseph, y lógicamente, nuera de Joshein. Estudiante de último año de Exactas, me ha saludado con mucha cordialidad, incluso dándome su mano, que para los que no conocéis ésta cultura, os diré que este detalle tiene un gran significado, ya que no está bien vista esta forma de saludo entre hombres y mujeres, salvo entre familiares. Con esto lo digo todo. Entre los tres han preparado una estupenda y típica cena iraní. Sin desmerecer lo más mínimo ninguno de los platos que tenemos sobre la mesa, quizá debido a mis gustos personales, me han parecido sobresalientes el yogurt (presente en todas las comidas persas) y un extraordinario pan hecho de maíz y verdura, artesanal, parecido de presencia al talo vasco, que puede llegar a aguantar hasta 3 meses antes de comerlo. Muy bonita la casa de Joshein, con un gran salón como eje central de la vivienda, tapizado con tres esplendidas y enormes alfombras iranís. Entre los numerosos cuadros que adornan el salón, me ha llamado la atención uno con el documento de la dote de boda de Arezoo y Joseph, firmado por hasta siete personas, algo parecido a los documentos notariales sobre dotes, que no hace tantos años, era muy frecuente en Euskal Herria. Yo mismo he tenido en mis manos alguno de estos documentos.

Gracias a los tres por la cena y también por vuestra amabilidad y consideración. Quedo con Joshein en hacerles una nueva visita, mañana al anochecer.

Un abrazo


No hay comentarios:

Publicar un comentario